Hoy en día, el tema del cambio climático prevalece en los foros de discusión internacionales, en las políticas internas de los países e incluso en los noticieros locales.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha considerado que el calentamiento global de los últimos 130 años es uno de los más cálidos desde 1850.
¿Cómo nos afecta a nosotros como seres vivientes?
Debido al consumo de combustibles fósiles, las cantidades de CO2 han aumentado y esto ha provocado grandes cambios climáticos que nos afectan de distintas maneras al no poder tener acceso a un aire limpio, agua potable, alimentos suficientes y una vivienda segura y sustentable.
Por mencionar algunos de los problemas que se enfrentan a nivel mundial debido al incremento del CO2 en la atmósfera:
- Los golpes de calor afectan a aquellas personas que padecen de enfermedades cardiovasculares y respiratorias, debido a que se aumentan los niveles de ozono y otros contaminantes del aire.
- El aumento de polen y alérgenos puede afectar a personas que padecen de problemas respiratorios como el asma.
- Las altas temperaturas y escasez de lluvias reducen la producción de alimentos básicos en muchas de las regiones, por lo que se podría tener un aumento de la desnutrición y malnutrición.
- El uso de agua contaminada para el riego de sembradíos genera enfermedades infecciosas e intestinales a nivel personal y mundial.
- El aumento de rayos UVC generados por la reducción de la capa de ozono podría generar cáncer en la piel.
- Los desastres naturales y enfermedades infecciosas asociadas provocan ansiedad, depresión, estrés psicológico y postraumático e incluso se plantea la aparición de nuevas enfermedades que afecten la salud mental.
Actualmente, la comunidad internacional se encuentra trabajando en conjunto a través de foros de discusión y cooperación para implementar medidas que reduzcan el impacto del cambio climático, así como para preservar el bienestar de la tierra y la comunidad viviente.
La alianza más importante que mantiene la comunidad internacional es con las Naciones Unidas para velar por la salud para que esté representada adecuadamente en la agenda sobre el cambio climático en los foros de discusión.
Individualmente, los países trabajan con su gobierno para la implementación de paneles solares, reforestación de bosques, proyectos de reciclaje, creación de sistemas de transporte ecológicos, planes para desarrollos de vivienda en comunidades de escasos recursos, sistemas de riego y cultivo con compuestos naturales, entre otros.
Para leer más sobre los proyectos que hoy en día la Organización Mundial de la Salud lleva a cabo alrededor del mundo, puedes visitar el siguiente sitio web: https://www.who.int/.
¿Cómo podemos ayudar?
Parece complicado, pero hay muchas formas en las que podemos aportar ayuda de formas muy sencillas y que no necesariamente impliquen movernos de casa o salir de nuestro país.
Aquí puedes encontrar una lista de ideas en caso de que quieras comenzar con grandes cambios:
- Evitar, en la medida de lo posible, dejar cualquier dispositivo conectado mientras no se esté utilizando, esto evitará que las partículas que irradian contaminen el aire.
- Dividir la basura en orgánico e inorgánico para la creación de compostas naturales, incluso, si te es posible, iniciar tu propio sistema de composta.
- Deposita en los puntos señalados el tetrapack y todos los envases de plástico para fomentar el reciclaje.
- Evita tirar basura en la calle, en muchos países este problema persiste. En caso de ver basura tirada, recogerla y depositarla en donde corresponde.
- Cuando vayas al supermercado, puedes llevar tus propias bolsas de tela para evitar el uso de bolsas de plástico.
- Los equipos electrónicos que ya no utilices, como celulares, pilas, audífonos, pueden depositarse en contenedores de desechos tóxicos, puedes buscar alguno de ellos en los puntos cercanos a tu área.
- Puedes usar tu ropa por más tiempo o comprar en bazares, ya que la industria de la moda consume muchos recursos naturales que afectan al medio ambiente y, por consiguiente, nuestra salud.
- Intenta ahorrar luz de vez en cuando evitando dejar todas las luces encendidas o utilizando un equipo electrónico a la vez.
- Puedes reciclar las hojas de papel; una vez que las utilices, puedes ocupar el lado que esté vacío para hacer notas.
- Mientras esperas a que el agua caliente de la regadera se caliente, puedes usar una cubeta y utilizar el agua para regar las plantas o lavar tu ropa.
Esta solo es una lista resumida de las acciones que podemos implementar para evitar la contribución al daño climático y seguir afectando nuestra salud de forma indirecta. El cambio debe empezar con acciones pequeñas para que, en un futuro, la vida humana no se vea enfrentada a la extinción o, peor aún, el mundo.
Referencias:
https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/climate-change-and-health
https://ifmsa.org/healthy-climate-prescription/
https://www.paho.org/es/temas/cambio-climatico-salud
https://www.gob.mx/cofepris/acciones-y-programas/impactos-del-cambio-climatico-en-la-salud
Categoría: Salud y Seguridad en el extranjero
Etiquetas: calentamiento global, cambio climático, capa de ozono, combustibles fósiles, comunidad internacional, contaminantes del aire, daño climático, desastres naturales, desechos tóxicos, enfermedades cardiovasculares, enfermedades respiratorias, medio ambiente, Naciones Unidas, niveles de ozono, Organización Mundial de la Salud, salud, salud mental
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