Diez consejos para beber de manera responsable (y seguir divirtiéndote) como estudiante internacional en una universidad de Estados Unidos

Publicado el jueves, 31 de agosto de 2023 en 4:55 pm.

Para muchos estudiantes internacionales, esta es la primera vez que experimentan la vida fuera de su país de origen sin tener una constante supervisión. Lo que lo convierte en un tiempo de crecimiento y autodescubrimiento. Por este motivo, uno de los aspectos de la vida universitaria estadounidense que prevalece en las películas, la televisión y la música son las fiestas y el consumo de alcohol; desde el icónico «vasito rojo» hasta los torneos de beer pong. No hay duda de que, puede ser difícil evitar por completo esta parte de la experiencia universitaria estadounidense, por lo que en International Student Insurance pensamos que sería conveniente compartir 10 consejos sobre cómo beber de manera responsable a todo aquel que esté estudiando en el extranjero.

1. Cuenta tus bebidas

Esta puede ser una forma útil de asegurarte que no estás bebiendo de más. También es importante que seas consciente de la cantidad de alcohol que hay en cada una de tus bebidas. Presta atención a los cócteles, ya que suelen estar compuestos por licor y algún mezclador (generalmente agua mineral, jarabes, refresco o jugo). Los mezcladores  pueden enmascarar el sabor del alcohol y podrías terminar consumiendo mucho más alcohol de lo previsto. Si no sabes qué contiene una bebida mezclada, ¡pregunta antes de beberla!

2. Bebe agua antes, durante y después de beber alcohol

Mantenerse hidratado es algo importante que hacer en general. En este caso, el alternar agua con bebidas alcohólicas permite que tu cuerpo procese el alcohol de manera más eficiente y también reduce la posibilidad de una resaca severa por la mañana. El «Líquido IV» está creciendo en popularidad en Estados Unidos y es un polvo que se agrega al agua para aumentar los electrolitos, lo que ayuda a la hidratación.

3. Come algo antes de beber

Asegúrate de comer antes y/o mientras tomas, ya que el alcohol se absorbe en el torrente sanguíneo a través del estómago y los intestinos. Tener comida en el estómago evitará que absorbas el alcohol muy rápido. No se recomienda comer alimentos salados, pues esto hará que te de más sed y terminarás consumiendo más alcohol de lo previsto originalmente. Algunos alimentos que se recomiendan comer antes y/o mientras bebes son palomitas de maíz, pretzels, galletas de trigo, plátanos y pan.

4. Ten cuidado con los juegos diseñados para tomar 

Si bien los juegos para tomar pueden ser divertidos, estos ejercen mucha presión para que consumas alcohol de manera rápida y, al mismo tiempo, también puedes sentir la presión de tus amigos y compañeros para «no defraudar al equipo». Recuerda que puedes ser un jugador de equipo sin tener que beber (pide agua o refresco en tu vaso en lugar de alcohol), o si lo prefieres, puedes bailar y participar en otras actividades sin alcohol.

5. No mezcles alcohol con bebidas energéticas

Por un lado, las bebidas energéticas contienen una gran cantidad de cafeína, que es un estimulante; y por el otro, el alcohol es naturalmente un depresor y consumir los dos juntos puede hacer que una persona se alborote mucho con la bebida durante más tiempo de lo normal. Las bebidas energéticas populares en los Estados Unidos que debes evitar mientras bebes alcohol incluyen Red Bull, Monster y Rockstar. Si te ofrecen bebidas que incluyen alguno de estos (como “Vodka Red Bull”), evítalos.

6. Escucha a tu cuerpo

Si en algún momento comienzas a sentirte mal, raro o desorientado, deja de beber y comienza a tomar agua. El sentirse enfermo o simplemente «apagado» es una manera en la que tu cuerpo reacciona al alcohol, y continuar bebiendo puede tener efectos desagradables como vómitos, mareos, lapsos de pérdida de la memoria u otras reacciones físicas más graves. Además, al día siguiente por la mañana puedes sufrir una resaca que te impida continuar con tu día.

7. No manejes bajo los efectos del alcohol

Conducir en estado de ebriedad es un delito muy grave en los Estados Unidos. Un servicio de viaje compartido o un taxi son alternativas mucho más baratas y más inteligentes que enfrentar cargos legales y penales -que incluyen la revocación de la visa-. No corras el riesgo de lastimarte a ti mismo o a una tercera persona. Algunas ciudades e incluso las propias universidades cuentan con excelente transporte público que podrías utilizar para salir a divertirte sin tener que preocuparte por tener que manejar. Si sales con un grupo de amigos, elijan a un conductor designado de antemano o creen un plan alternativo para llegar a casa de manera segura.

8. Si no te sientes cómodo tomando, no lo hagas

Quizás tuviste un largo día en la escuela, tienes un examen próximamente, algo importante que hacer al día siguiente o simplemente no quieres beber. Cualquiera que sea el motivo, o sin motivo alguno, recuerda que puedes decir no a la bebida y a la presión social. Decir “no quiero” es una razón perfectamente válida para tener una noche tranquila o hacer algo que no involucre alcohol. Es difícil o incómodo decir que no, pero una vez que comiences a hacerlo, irás ganando confianza. Muchas universidades tienen eventos nocturnos sin alcohol o puedes investigar un poco para encontrar otras cosas divertidas para hacer dentro, fuera y alrededor de tu campus.

9. Sé consciente y pon atención de tus alrededores

A medida que bebas más, puedes comenzar a desorientarte. Asegúrate de saber bien en dónde estás, a dónde vas a ir y con quién. También es una buena idea llevar tu bebida contigo en todo momento, para poder fijarte que nadie introduzca algo dañino en ella. Si dejas tu bebida por accidente, es mejor que pidas o te sirvas una nueva.

10. No mezcles tipos de alcohol

Al elegir un solo tipo de bebida, es más fácil tener un seguimiento del número de tragos y el tipo de alcohol que estás consumiendo. Por ejemplo, si comienzas con cerveza, puede que la consumas con bastante rapidez y, al cambiar a una bebida más fuerte, como un cóctel o vino, consumirás alcohol más rápido de lo normal. En cambio, si empiezas la noche bebiendo cerveza, es una buena idea continuar bebiendo lo mismo. Porque mezclar diferentes tipos de alcohol también puede hacer que te sientas aún peor y que tengas una resaca aún más grande al día siguiente.